Preparación
- Selección del vino: El Rejadorada Crianza se elabora seleccionando meticulosamente las mejores uvas de tinta de toro, garantizando así la calidad desde su origen.
- Temperatura: Se recomienda servir este vino entre 16°C y 18°C para apreciar plenamente su estructura y bouquet.
- Copas: Utilizar copas de cristal transparente y de borde fino facilita la apreciación de sus colores y aromas.
Fase visual
- Color: Presenta un color rojo cereza intenso con destellos violáceos, indicativo de su juventud y vitalidad.
- Limpieza: En copa, muestra una notable limpieza y brillantez, reflejando su cuidadosa elaboración.
Fase olfativa
- Aromas: En nariz, se perciben intensos aromas a frutos rojos maduros, notas balsámicas y un sutil fondo especiado.
- Intensidad: Destaca por su alta intensidad aromática, que se despliega con cada movimiento de la copa.
- Complejidad: Su nariz compleja revela también toques de cacao y vainilla, resultado de su crianza en roble.
Fase gustativa
- Sabor: En boca, el Rejadorada Crianza es equilibrado y estructurado, con taninos suaves y una acidez bien integrada.
- Cuerpo: Presenta un cuerpo medio a completo, que llena el paladar con una agradable sensación de volumen.
- Persistencia: Su final es largo y persistente, dejando recuerdos de frutos negros y un ligero regusto especiado.
- Equilibrio: Se destaca por un excelente equilibrio entre fruta, madera y acidez, característica de los grandes vinos de Toro.
Conclusiones
- Impresiones generales: El Rejadorada Crianza es un vino que impresiona por su elegancia y estructura, ideal para los amantes de los tintos con carácter.
- Maridaje: Perfecto para acompañar carnes rojas asadas, caza mayor y quesos curados.
- Puntuación: Con una puntuación alta en la escala de calidad, este vino merece ser disfrutado en ocasiones especiales.
Resumen
El Rejadorada Crianza de Bodega Ramón Ramos es un excelente ejemplo de la calidad y tradición vinícola de Toro, ofreciendo un tinto robusto y complejo, con aromas intensos, equilibrado en boca y con un final persistente. Ideal para maridar con platos contundentes o para disfrutarlo solo en momentos de deleite.