Introducción
El Pedro Ximénez de la bodega Alvear, cosecha 2001, representa un ejemplo sobresaliente del arte de la vinificación en la región de Montilla-Moriles. Este vino, elaborado exclusivamente con uvas de la variedad Pedro Ximénez, ha sido cuidadosamente envejecido para ofrecer una experiencia sensorial única y compleja.
Preparación
- Selección del vino: Para disfrutar plenamente del Pedro Ximénez de Alvear, es crucial seleccionar una botella de añada, como la del 2001, que ha madurado con elegancia en barricas de roble.
- Temperatura: Se recomienda servir este vino a una temperatura ligeramente fresca, entre 12°C y 14°C, para resaltar su estructura y armonía.
- Copas: Utilizar copas tipo copa de vino blanco, de cristal fino y con una abertura moderada, favorece la concentración de los aromas y la adecuada apreciación en boca.
Fase visual
- Color: Presenta un profundo color ámbar con matices dorados, propio de su larga crianza oxidativa.
- Limpieza: Su limpidez es notable, sin presencia de sedimentos, reflejando su calidad y cuidadoso proceso de elaboración.
Fase olfativa
- Aromas: En nariz, despliega intensos aromas a pasas, higos secos, miel y notas de madera, con un fondo sutil de caramelo.
- Intensidad: Los aromas son persistentes y de gran intensidad, invitando a explorar cada capa con detalle.
- Complejidad: Su complejidad aromática revela la profundidad y la riqueza de este vino único.
Fase gustativa
- Sabor: En boca, destaca por su dulzura equilibrada, con sabores que recuerdan a frutas confitadas y especias suaves.
- Cuerpo: Posee un cuerpo denso y sedoso que llena el paladar con suavidad y elegancia.
- Persistencia: La persistencia en boca es extraordinaria, prolongando el placer de su degustación durante varios minutos.
- Equilibrio: Su equilibrio entre dulzura y acidez es notable, garantizando una experiencia gustativa armoniosa y placentera.
Conclusiones
- Impresiones generales: El Pedro Ximénez de Alvear, añada 2001, es un vino excepcional que combina la tradición vinícola con la calidad suprema. Su complejidad aromática, dulzura equilibrada y persistencia en boca lo convierten en una joya enológica.
- Maridaje: Ideal para acompañar postres elaborados, como tartas de frutas, helados de vainilla o quesos azules intensos.
- Puntuación: Este vino merece una alta puntuación, destacando por su elegancia y carácter único.
Resumen
El P.x. de Añada 2001 de Alvear, Montilla-Moriles, es un Pedro Ximénez excepcional por su color ámbar profundo, aromas intensos a pasas y miel, sabor dulce equilibrado con cuerpo sedoso, y una persistencia notable en boca. Perfecto para acompañar postres elaborados y merecedor de una alta puntuación por su calidad y complejidad.