Preparación
- Selección del vino: Es crucial elegir el momento adecuado para disfrutar del Piedra Jurada Listán 2002 Afrutado, asegurándose de almacenarlo correctamente y a la temperatura ideal.
- Temperatura: Se recomienda servir este vino a una temperatura entre 8-10°C, lo que realza sus matices afrutados y frescos.
- Copas: Utilizar una copa de tipo tulipa favorece la concentración de aromas y el adecuado desarrollo del vino en boca.
Fase visual
- Color: Presenta un color amarillo pálido con destellos verdosos, propio de los vinos blancos jóvenes y frescos.
- Limpieza: Su aspecto limpio y brillante revela un proceso de elaboración cuidadoso y una filtración adecuada.
Fase olfativa
- Aromas: Desprende aromas intensos a frutas tropicales como piña y maracuyá, complementados por notas cítricas de lima y pomelo.
- Intensidad: Los aromas son de intensidad media-alta, lo que anticipa una experiencia olfativa satisfactoria y compleja.
- Complejidad: A pesar de su juventud, muestra una complejidad aromática que invita a explorar sus capas sensoriales.
Fase gustativa
- Sabor: En boca es fresco y equilibrado, con una acidez refrescante que resalta sus sabores frutales y cítricos.
- Cuerpo: Tiene un cuerpo ligero y una textura suave, característica típica de los vinos blancos jóvenes.
- Persistencia: Su final es limpio y persistente, dejando una agradable sensación en el paladar que perdura.
- Equilibrio: Hay un excelente equilibrio entre la acidez, el alcohol y los sabores frutales, lo que contribuye a su armonía general.
Conclusiones
- Impresiones generales: El Piedra Jurada Listán 2002 Afrutado es un vino blanco que destaca por su frescura, complejidad aromática y equilibrio en boca, ideal para disfrutar en cualquier ocasión.
- Maridaje: Perfecto para acompañar mariscos, pescados blancos o ensaladas frescas, realzando los sabores del plato y del vino.
- Puntuación: 9/10. Un vino que sobresale por su calidad y carácter, recomendado tanto para aficionados como para expertos.
Resumen
El Piedra Jurada Listán 2002 Afrutado es un vino blanco de la Bodega S. A. T. Bodegas Perdomo en La Palma, caracterizado por su frescura y complejidad aromática. Con aromas a frutas tropicales y cítricos, un cuerpo ligero y una acidez refrescante, ofrece una experiencia gustativa equilibrada y persistente. Ideal para acompañar mariscos y pescados blancos, es un vino que captura la esencia de su origen y añada de manera excepcional.