Introducción
El vino Marqués de Castilla 1996 es una joya vinícola que nos transporta a las vastas tierras de La Mancha, donde la Bodega Crisve, bajo la tutela de la Sociedad Cooperativa Cristo de la Vega, ha cultivado con esmero la variedad cencibel. Este tinto reserva encarna la pasión y el savoir-faire de una región conocida por sus climas extremos y su tradición vitivinícola.
Preparación
- Selección del vino: Para disfrutar plenamente del Marqués de Castilla 1996, es crucial seleccionar una botella que haya sido cuidadosamente almacenada y conservada, asegurando así que todas sus cualidades se mantengan intactas.
- Temperatura: Se recomienda servir este tinto reserva ligeramente fresco, entre 16°C y 18°C, para realzar sus aromas y sabores sin comprometer su estructura.
- Copas: Utilizar copas de cristal fino tipo burdeos, ideales para capturar y concentrar los matices aromáticos y visuales que distinguen a este vino.
Fase visual
- Color: El Marqués de Castilla 1996 presenta un color rojo rubí profundo con matices granates en el borde, indicativo de su larga crianza en barrica y botella.
- Limpieza: Su brillantez y limpieza son evidentes, reflejando su cuidada elaboración y crianza en condiciones óptimas.
Fase olfativa
- Aromas: En nariz, este tinto reserva despliega una complejidad aromática notable, con notas predominantes de frutos rojos maduros, vainilla, y un sutil toque especiado.
- Intensidad: Los aromas son intensos y persistentes, revelando la profundidad y la concentración alcanzadas durante su elaboración.
- Complejidad: Su bouquet complejo invita a explorar capas sucesivas de aromas que evolucionan en la copa, revelando la riqueza de su origen y proceso de crianza.
Fase gustativa
- Sabor: En boca, el Marqués de Castilla 1996 muestra una armoniosa fusión de fruta madura, madera bien integrada y un elegante fondo de especias, todo enmarcado por taninos sedosos.
- Cuerpo: Su cuerpo medio a completo confirma su estructura robusta y su equilibrio entre frescura y profundidad.
- Persistencia: La persistencia en el paladar es notable, dejando una impresión prolongada que invita a seguir disfrutando de cada sorbo.
- Equilibrio: El equilibrio entre sus componentes asegura una experiencia gustativa satisfactoria y memorable.
Conclusiones
- Impresiones generales: El Marqués de Castilla 1996 es un ejemplo magistral de la excelencia vinícola de La Mancha, destacando por su complejidad aromática, su estructura elegante y su persistencia en boca.
- Maridaje: Ideal para acompañar carnes rojas asadas, cordero estofado o quesos curados, este tinto reserva complementa platos robustos y sabrosos.
- Puntuación: Con una puntuación destacada, el Marqués de Castilla 1996 merece ser apreciado por cualquier aficionado al buen vino que valore la tradición y la calidad.
Resumen
El Marqués de Castilla 1996, elaborado por la Bodega Crisve en La Mancha con uvas cencibel, es un tinto reserva que cautiva desde su profundo color rojo rubí hasta su persistente final en boca. Destaca por sus aromas complejos, su estructura bien definida y su versatilidad en maridaje, convirtiéndolo en una elección excelente para momentos especiales y cenas memorables.