Introducción
El vino tinto reserva Marqués de Castilla 1998 es un tesoro de la Bodega Crisve en la zona vinícola de La Mancha. Con su larga maduración en barrica y botella, este vino promete revelar la esencia única de su terroir con cada sorbo.
Preparación
- Selección del vino: Escoger adecuadamente el Marqués de Castilla 1998 garantiza disfrutar de su máximo esplendor. Optar por una botella en buen estado y con el debido almacenamiento asegura una experiencia memorable.
- Temperatura: Servir entre 16°C y 18°C permite que este tinto reserve despliegue todos sus matices y complejidades sin perder su carácter.
- Copas: Utilizar copas de cristal fino y de borde fino ayuda a concentrar los aromas y a apreciar la estructura y el color del Marqués de Castilla 1998 de manera óptima.
Fase visual
- Color: Presenta un intenso color rubí profundo, indicativo de su larga crianza y evolución en botella.
- Limpieza: Su brillantez y transparencia denotan una excelente claridad y pureza, reflejando su calidad y cuidado en la elaboración.
Fase olfativa
- Aromas: Despliega notas complejas de frutos rojos maduros, especias dulces y un sutil toque de vainilla, resultado de su paso por roble.
- Intensidad: Su bouquet aromático es potente y envolvente, invitando a explorar sus capas con cada olfateo.
- Complejidad: La variedad y profundidad de sus aromas revelan su complejidad y refinamiento, características distintivas del Marqués de Castilla 1998.
Fase gustativa
- Sabor: En boca, muestra una armoniosa combinación de frutas maduras, notas tostadas y un delicado fondo mineral, enriquecido por taninos suaves y bien integrados.
- Cuerpo: Su cuerpo medio con una estructura bien definida proporciona una sensación sedosa y equilibrada en el paladar.
- Persistencia: Su final es largo y persistente, dejando una impresión duradera que invita a seguir disfrutando de cada sorbo.
- Equilibrio: La perfecta armonía entre sus componentes asegura un equilibrio notable, resaltando la calidad y el cuidado en su elaboración.
Conclusiones
- Impresiones generales: El Marqués de Castilla 1998 es un ejemplo excepcional de un tinto reserva que combina elegancia, complejidad y carácter en cada aspecto sensorial.
- Maridaje: Ideal para acompañar carnes rojas asadas, cordero estofado o quesos curados, realzando tanto la comida como el vino.
- Puntuación: Con base en su calidad y experiencia sensorial, merece una alta puntuación que refleje su excelencia y valor enológico.
Resumen
El Marqués de Castilla 1998, un tinto reserva de la Bodega Crisve en La Mancha, destaca por su complejidad aromática, estructura equilibrada y final persistente. Ideal para acompañar platos robustos, este vino es una verdadera joya que captura la esencia de su terroir con elegancia y sofisticación.