Preparación
- Selección del vino: La Hijuela Airén se elabora seleccionando cuidadosamente las uvas Airén en su punto óptimo de maduración.
- Temperatura: Se recomienda servir este vino blanco entre 8°C y 10°C para realzar sus aromas y frescura.
- Copas: Para disfrutar plenamente de sus cualidades, se aconseja utilizar copas tipo tulipa, que permiten concentrar los aromas en la parte superior.
Fase visual
- Color: La Hijuela Airén presenta un color amarillo pajizo con reflejos verdosos, limpio y brillante.
- Limpieza: En la copa muestra una limpidez notable, sin sedimentos ni impurezas visibles.
Fase olfativa
- Aromas: En nariz, predominan los aromas a frutas blancas como la pera y notas cítricas sutiles, acompañadas de un fondo floral agradable.
- Intensidad: Los aromas se perciben con una intensidad moderada, que invita a explorar el vino con curiosidad.
- Complejidad: Presenta una complejidad aromática sencilla pero atractiva, ideal para quienes buscan vinos blancos frescos y ligeros.
Fase gustativa
- Sabor: En boca es equilibrado, con una acidez refrescante que realza los sabores frutales y cítricos característicos del Airén.
- Cuerpo: Tiene un cuerpo ligero y una textura suave, que lo hacen fácil de beber y disfrutar en cualquier ocasión.
- Persistencia: Su final es limpio y persistente, dejando una sensación fresca y agradable en el paladar.
- Equilibrio: Se destaca por un equilibrio armonioso entre acidez, frescura y sabores frutales, que lo hacen muy versátil para maridar.
Conclusiones
- Impresiones generales: La Hijuela Airén es un vino blanco que cautiva por su frescura y simplicidad aromática, ideal para acompañar momentos relajados o comidas ligeras.
- Maridaje: Perfecto para acompañar mariscos, pescados blancos o ensaladas frescas, potenciando sus sabores y refrescando el paladar.
- Puntuación: 8/10. Un vino blanco bien equilibrado y accesible, excelente opción para quienes disfrutan de vinos frescos y ligeros.
Resumen
La Hijuela Airén de Sdad. Coop. Agro-Vitivinícola San Isidro es un vino blanco de La Mancha, destacado por sus aromas a frutas blancas y cítricos, su frescura y equilibrio en boca. Ideal para maridar con mariscos y pescados blancos, ofrece una experiencia sensorial placentera con cada sorbo.