Introducción
En el mundo de los vinos, el Olivares 2016 Crianza destaca por ser un exponente notable de la D.O. Jumilla. Este tinto crianza elabora con 100% Monastrell y presenta un perfil que refleja tanto la calidad de la bodega como el carácter distintivo de su zona de producción. Al tratarse de un vino de crianza, ha pasado tiempo en barrica, lo que contribuye a su complejidad y riqueza en sabores.
Preparación
- Selección del vino: Para apreciar al máximo las cualidades del Olivares 2016 Crianza, es recomendable elegir una botella que haya sido almacenada en condiciones óptimas. Un buen almacenamiento preserva sus propiedades y garantiza que el vino se encuentre en su mejor estado al momento de la cata.
- Temperatura: Servir el Olivares 2016 Crianza a la temperatura adecuada es esencial para disfrutar de sus características. La temperatura recomendada para este tinto crianza es entre 16 y 18 grados Celsius, lo que permite que sus aromas y sabores se expresen plenamente.
- Copas: Utilizar una copa de vino tinto amplia es ideal para el Olivares 2016 Crianza. Esto facilita el contacto del vino con el oxígeno, potenciando la liberación de sus aromas y sabores.
Fase visual
- Color: El Olivares 2016 Crianza muestra un color rojo profundo con matices que revelan su crianza. Su tonalidad oscura es indicativa de una buena maduración y de la intensidad del vino.
- Limpieza: Este vino presenta una limpieza excelente. No se observan impurezas ni sedimentos en el líquido, lo que refleja una correcta vinificación y almacenamiento.
Fase olfativa
- Aromas: En la fase olfativa, el Olivares 2016 Crianza revela un bouquet complejo. Se pueden detectar notas de frutos rojos maduros, junto con matices de madera y un toque de especias que aportan profundidad.
- Intensidad: El aroma de este vino tiene una intensidad alta, lo que permite una percepción clara de sus distintos componentes olfativos. Esto es un indicativo de la calidad del proceso de crianza.
- Complejidad: La complejidad aromática del Olivares 2016 Crianza es notable. La interacción entre los aromas frutales y las notas especiadas muestra un equilibrio bien logrado, resultando en una experiencia olfativa rica y envolvente.
Fase gustativa
- Sabor: En boca, el Olivares 2016 Crianza ofrece un sabor robusto con un predominio de frutos rojos y un sutil toque terroso. Las notas de madera aportan una agradable sensación de crianza.
- Cuerpo: Este vino posee un cuerpo medio a alto. Su estructura es sólida, pero no abrumadora, permitiendo una degustación equilibrada y placentera.
- Persistencia: El Olivares 2016 Crianza tiene una persistencia media-larga. Los sabores permanecen en el paladar después de la degustación, ofreciendo un final gratificante.
- Equilibrio: El equilibrio entre ácidez, taninos y alcohol en este vino es excelente. La integración de estos elementos contribuye a una experiencia de cata armoniosa y bien estructurada.
Conclusiones
- Impresiones generales: El Olivares 2016 Crianza es un vino tinto que destaca por su perfil aromático complejo y su sabor robusto. Su cuerpo y persistencia hacen de este vino una opción destacada para quienes buscan un tinto crianza de calidad.
- Maridaje: Este vino acompaña muy bien a platos con carne roja, asados y quesos curados. Su estructura y sabor complementan perfectamente estos alimentos, realzando la experiencia culinaria.
- Puntuación: El Olivares 2016 Crianza ha recibido una puntuación de 90 puntos, reflejando su alta calidad y la satisfacción que ofrece en cata.
Resumen
El Olivares 2016 Crianza es un vino tinto crianza de la D.O. Jumilla, elaborado con 100% Monastrell. Su perfil visual, olfativo y gustativo revela una alta calidad, con un color profundo, aromas complejos y un sabor robusto. Con una puntuación de 90, es una excelente elección para acompañar carnes y quesos. Su equilibrio y persistencia aseguran una experiencia de cata satisfactoria.