Introducción
El vino tinto crianza de Celler Vall-Llach es un testimonio del arte vinícola en el Priorato. Con su añada del 1999 y la predominancia de Tempranillo, promete una experiencia sensorial rica en aromas y sabores.
Preparación
- Selección del vino: El vino tinto crianza de Celler Vall-Llach requiere una cuidadosa selección, garantizando su calidad y carácter distintivo.
- Temperatura: Se recomienda servir este tinto crianza a una temperatura fresca, entre 16°C y 18°C, para resaltar sus complejos matices.
- Copas: El uso de copas adecuadas, preferiblemente de cristal fino y forma redondeada, realza la experiencia sensorial de este vino.
Fase visual
- Color: Presenta un profundo color rojo rubí con destellos granates, indicativo de su crianza y madurez.
- Limpieza: Su limpidez brillante evidencia un proceso de vinificación meticuloso y cuidadoso.
Fase olfativa
- Aromas: Despliega aromas intensos de frutos maduros, notas de vainilla y sutiles toques especiados.
- Intensidad: En nariz, su intensidad aromática es notable, invitando a explorar sus capas sensoriales.
- Complejidad: Su complejidad aromática revela la riqueza de su crianza en barrica y botella.
Fase gustativa
- Sabor: En boca, ofrece una armoniosa combinación de frutas maduras, especias y toques de madera bien integrados.
- Cuerpo: Su cuerpo medio y estructura bien definida proporcionan una textura sedosa y agradable en el paladar.
- Persistencia: Finaliza con una persistencia larga y elegante, dejando un recuerdo agradable y duradero.
- Equilibrio: Su equilibrio entre acidez, dulzura y taninos garantiza una experiencia gustativa equilibrada y placentera.
Conclusiones
- Impresiones generales: El vino tinto crianza 1999 de Celler Vall-Llach es una muestra de la excelencia enológica del Priorato, ideal para aquellos que buscan calidad y sofisticación en cada sorbo.
- Maridaje: Perfecto para acompañar carnes rojas asadas, cordero estofado o quesos curados, realzando tanto el plato como el vino.
- Puntuación: Con una puntuación destacada, este vino es una elección segura para quienes aprecian la historia y el arte detrás de cada botella.
Resumen
El vino tinto crianza 1999 de Celler Vall-Llach del Priorato, elaborado con Tempranillo, cautiva con sus aromas intensos, cuerpo sedoso y persistencia elegante. Perfecto para maridar con carnes y quesos, es una joya enológica que merece ser disfrutada con calma y buen gusto.