Introducción
El Oliveros 2012 Crianza es un vino tinto crianza que proviene de la región de Condado de Huelva en España. Este vino destaca por su mezcla de 75% Tempranillo y 25% Syrah, creando una combinación que resalta tanto las características tradicionales del Tempranillo como las notas más especiadas y profundas del Syrah. Elaborado por Bodegas Oliveros, este crianza refleja el terroir de su zona de producción, ofreciendo una experiencia sensorial rica y equilibrada.
Preparación
- Selección del vino: Para disfrutar plenamente del Oliveros 2012 Crianza, es esencial seleccionar una botella en buen estado, con una adecuada conservación que preserve todas sus cualidades. Verifica que el corcho esté en condiciones óptimas y que el vino haya sido almacenado en un lugar fresco y oscuro.
- Temperatura: Este vino tinto crianza debe ser servido a una temperatura de entre 16 y 18 grados Celsius. Esta temperatura permite que el Oliveros 2012 Crianza exprese sus aromas y sabores de manera óptima, equilibrando su perfil y facilitando una degustación más placentera.
- Copas: Utiliza copas de vino tinto con un cáliz amplio para permitir que el Oliveros 2012 Crianza respire y despliegue sus complejas notas aromáticas. Las copas con un borde más ancho son ideales para este tipo de vino, favoreciendo una mejor oxigenación y una experiencia de cata más completa.
Fase visual
- Color: El Oliveros 2012 Crianza presenta un color rojo rubí intenso con matices que tienden al granate en los bordes. Este tono profundo indica una buena evolución en botella y una crianza que ha favorecido el desarrollo de matices en el vino.
- Limpieza: El vino muestra una excelente limpieza y claridad. No presenta sedimentos ni turbidez, lo que es indicativo de una adecuada filtración y conservación durante el proceso de crianza.
Fase olfativa
- Aromas: En nariz, el Oliveros 2012 Crianza revela una rica combinación de frutas rojas maduras, como cereza y ciruela, acompañadas de notas especiadas y toques de vainilla provenientes de su crianza en barrica. También se perciben sutiles notas de cuero y tabaco, que añaden complejidad a su perfil aromático.
- Intensidad: La intensidad aromática es moderada a alta, permitiendo que los aromas se manifiesten claramente sin resultar abrumadores. Esta intensidad facilita una experiencia olfativa envolvente y agradable.
- Complejidad: El Oliveros 2012 Crianza ofrece una complejidad notable, con un equilibrio entre las notas frutales, especiadas y las derivadas de su crianza. La interacción de estos elementos crea un bouquet sofisticado y bien integrado.
Fase gustativa
- Sabor: En boca, el Oliveros 2012 Crianza presenta un sabor frutal y suave, con matices de especias y un leve toque terroso. La presencia de taninos es notable, pero bien integrados, aportando estructura sin resultar astringente.
- Cuerpo: El vino tiene un cuerpo medio a pleno, proporcionando una sensación de plenitud en el paladar que es característica de los crianzas bien elaborados.
- Persistencia: La persistencia es adecuada, con un retrogusto que prolonga las sensaciones frutales y especiadas, dejando un final agradable y ligeramente seco.
- Equilibrio: El equilibrio del Oliveros 2012 Crianza es notable, con una armonía entre acidez, taninos y sabores que permite una experiencia de cata placentera y bien estructurada.
Conclusiones
- Impresiones generales: El Oliveros 2012 Crianza es un vino que refleja la calidad y el carácter de la Bodega Oliveros y la región del Condado de Huelva. Su perfil aromático y gustativo bien equilibrado lo hace una opción atractiva para los amantes de los vinos tintos con crianza.
- Maridaje: Este vino es ideal para acompañar platos de carne roja, carnes a la parrilla y quesos curados. Su estructura y sabores complementan perfectamente estos alimentos, realzando tanto el vino como los platos.
- Puntuación: El Oliveros 2012 Crianza merece una puntuación de 86 puntos, destacándose por su equilibrio y complejidad, que lo convierten en una elección excelente dentro de su categoría.
Resumen
El Oliveros 2012 Crianza es un tinto crianza que muestra un equilibrio notable entre sus componentes frutales, especiados y de crianza. Con una temperatura de servicio adecuada, copas apropiadas y una correcta preparación, este vino ofrece una experiencia completa y placentera. Su perfil visual, olfativo y gustativo se caracteriza por una buena intensidad y complejidad, destacando en su categoría. Ideal para acompañar platos de carne roja y quesos curados, es una opción recomendada para quienes aprecian un crianza bien estructurado y equilibrado.